Érase una vez en
1915, cuando los alemanes estaban en guerra contra los franceses.
Yo tenía una
familia que por desgracia me la habían arrancado de mi vida poco a poco. Mi
familia y yo éramos franceses y recibíamos la ayuda de los ingleses, los
alemanes eran muy violentos, tras haberme quitado a mí marido que fue el
primero de todos, que actuaba contra ellos.
Un día tan bonito, como hoy, lleno
de nubes, y con ganas de vivir, aparecieron
por nuestras casas unos señores colgando con muchas armas a los hombros. Ellos
venían buscando a mis hijos, llamados Catherine y Adriana.
Otro día después
de que me quitaron a mis hijas gemelas venían en busca mía, pero yo me pude
escapar.
Cuando me escape, días más tarde vi como aterrizaba un avión de salvamento en una explanada de
tierra. De allí salían tres hombres armados que venían a recoger a sus
compañeros heridos. Cuando se
fueron, pude volver a escapar de esos
demonios. Más tarde pude llegar a una ciudad donde pude encontrar una
periodista y poderle contar todo lo que había sufrido para poder llegar allí.
Al final, después
de poder desahogarme me encontraron y me trataron como un esclava y no volví a
saber nada más de mis hijos, ni de mi marido.
Covadonga 2º ESO CPEB Aurelio Menéndez
No hay comentarios:
Publicar un comentario